Huellas Y Partituras
View more presentations from Eva Ortega.
En equipo extendimos un rollo de papel gigante y con cinta aislante fuimos tirando líneas y procurando que fueran rectas. El compás era distinto al habitual.
Luego cada uno tenía su propio espacio en la partitura para dejar su huella. La huella tenía que ser del propio cuerpo. No importaba qué parte: manos, pies, orejas, nariz, puños, labios, codos, rodillas, etc.
No hay comentarios:
Publicar un comentario